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Se instalarán en estaciones de servicio cargadores ultrarrápidos fabricados en Portugal
DFC, de la mano de i-charging, instalarían hasta 30 cargadores blueberry a la semana en electrolineras, que permiten cargar una autonomía de 1.400 kilómetros en una hora, y en veinte minutos, 400 km. En la actualidad, esta tecnología solo puede ser utilizada por vehículos eléctricos de alta gama.
DFC Factory Telecom Solutions, empresa de servicios industriales y telecomunicaciones con sede en Barberà del Vallès (Barcelona), entra en el sector de las electrolineras a través de su División DFC e-Power mediante un acuerdo exclusivo de distribución con i-charging, empresa portuguesa en electrificación de la movilidad. El objetivo del acuerdo es comercializar el Cargador eléctrico ultrarrápido blueberry en las estaciones de servicio, urbanas e interurbanas.
100% fabricado en Portugal
El diseño del cargador y su producción se realiza 100% en Portugal y su capacidad, entre 50 y 600 kW, permite cargar entre el 20% y el 80% de la capacidad de la batería del vehículo en 15 – 20 minutos. Además, su diseño cuenta con un cable de 4,7 metros de longitud, equivalente al de la gasolinera, y sirve para vehículos con todo tipo de batería.
En declaraciones a pv magazine, el CEO de DFC José Miguel de Fulgencio explica que “se trata de una familia de cargadores: el básico, de 50 kW, se puede ampliar hasta 600 kW. Eso quiere decir que cualquier tipo de vehículo puede cargar 1.400 kilómetros en una hora, y en veinte minutos, 400 km”. Añade que esta velocidad de carga era, hasta ahora, propia solamente de vehículos de alta gama que empiezan a salir al mercado.
El CEO de DFC recuerda que “la legislación impone la creación de Zonas de Baja Emisión ZBE en todas las ciudades de España de más de 50.000 habitantes, con lo cual nos centraremos en primera instancia en las estaciones de servicio próximas a estas zonas de exclusión, dado que son las que tienen mayor necesidad de adaptarse a la legislación. Los contactos con cadenas de autoservicio y low cost están muy avanzados”.
DFC e-Power ha previsto un plan de trabajo para instalar las electrolineras que permitirá seguir operando en todo momento a las estaciones de servicio e incluye un servicio completo, llave en mano, así como consultoría para la reorganización de la estación de servicio en todos los aspectos.
De Fulgencio señala la necesidad de atender rápidamente el crecimiento del vehículo eléctrico, que se prevé que alcance las 60.000 matriculaciones en España en 2021. ”Hoy, la persona que se decide a comprar un coche eléctrico se pregunta ‘dónde voy a cargar, cuánto tiempo tengo que esperar’. Las gasolineras tendrán que ofrecer este servicio. El despliegue puede ser masivo en función de los presupuestos que tenga cada estación de servicio. En 2022, se pueden hacer entre 20 y 30 instalaciones mensuales”.
Ayudas a posteriori
El acuerdo de distribución en exclusiva con i-charging, empresa portuguesa de electrificación de la movilidad, se realiza en el contexto de los fondos europeos Next Generation. José Miguel Fulgencio, asegura que “el cliente que quiera disponer de esos equipos lo puede comprar y luego se gestionan esas ayudas a posteriori, vengan antes o vengan después”.
Mientras que en Noruega el vehículo eléctrico representa 75% de su parque automovilístico, en España apenas supera el 2%. “Vamos tarde, pero es una gran oportunidad para nosotros, para el sector y para el mercado”. En España hay más de 11.000 gasolineras.
